Cruzar fronteras es una de las experiencias que más inseguridad y nerviosismo crean en los viajeros, incluso en los más experimentados. No importa si se hace en avión, tren, autobús o a pie, cruzar una línea imaginaria nos saca de nuestra zona de confort y hace que surjan dudas. Dudas para las que muchas veces no encontramos una solución satisfactoria en Internet, donde la información puede ser contradictoria o simplemente incorrecta.
Con el fin de resolver esas dudas nace esta nueva sección en nuestro blog. Como ya sabréis nosotros intentamos cruzar el mayor número posible de fronteras por tierra y a poder ser de la forma más económica posible (la información sobre los cruces fronterizos en avión está mucho más regulada sobre todo por la mediación de las compañías aéreas). Durante lo que llevamos de viaje nos vamos dando cuenta que mucha gente no sabe lo que se va a encontrar cuando se acerca al puesto fronterizo y muchas veces tenemos que ejercer de “improvisados” guías fronterizos con otros viajeros.
La cara de felicidad lo dice todo. ¡Vamos para Camboya!
Todo esto nos motiva a crear esta nueva sección donde queremos dejar constancia para otros viajeros de cómo lo hicimos nosotros, nuestras impresiones y nuestros consejos para que cruzar la frontera no nos traiga quebraderos de cabeza innecesarios. Eso sí, combiene que recordemos que la situación de una determina frontera depende enteramente de factores geopoliticos por lo que hay que ser prudente al seguir cualquier recomendación.
Cruzando la frontera de Tailandia a Laos: Aranyapratet - Poipet
Tras buscar en Internet todas las posibilidades para dejar atrás Tailandia y dirigirnos a Camboya decidimos optar por ir desde Bangkok hasta Aranyapratet en tren, cruzar la frontera a píe y coger un autobús al otro lado que nos llevará a Siem Reap, muy cerca ya de Angkor Wat (hay varios autobuses turísticos directos que hacen la línea Bangkok - Siem Reap pero son más caros). Partimos de la estación central en la capital y llegamos a la última parada de la línea, Aranyapratet. El trayecto duró unas 6 horas y por sólo 48 Baths (1€ = 40 Baths). Desde aquí se puede caminar hasta el puesto fronterizo aunque nosotros decidimos compartir un tuk-tuk con dos viajeros más. Por este trayecto pagamos 100 Baths a repartir entre los cuatro.
Una de las paradas de camino a Camboya.
En este momento hay que ser claro con el conductor y decirle que se quiere ir a la frontera y no a un edificio que se encuentra un poco antes donde te harán la Visa on Arrival. Se trata de un engaño muy típico en esta frontera donde te cobrarán mucho más que lo que vale el visado oficialmente en la frontera. Desde donde nos deja el tuk-tuk hay que caminar por un pasillo hasta el control de pasaportes de Tailandia.
Tras el sello de turno se pasa a la tierra de nadie, llena de casinos, y caminando llegamos hasta un edificio fronterizo camboyano señalizado con el cartel de visa on arrival. Allí hay que completar un formulario y pagar los 30$ del visado. El precio está establecido en un cartel oficial encima de la ventanilla pero los oficiales de fronteras han decidido implementar una pequeña cuota de 100 Baths por las molestias y para hacerlo más oficial han decidido poner un cartel hecho a mano donde pone el precio de la Visa 30$ + 100 Baths. Nótese la ironía. Creemos que en este caso no merece la pena discutir por menos de 2.5€ y más cuando todos los agentes son supersimpáticos y el trámite se soluciona en poco más de 5 minutos.
Con el visado ya en el pasaporte queda un poco más de caminata hasta el puesto de control fronterizo donde nos pondrán el sello de entrada. Al otro lado hay esperando un autobús gratuito que nos llevará hasta la estación de autobuses en las afueras de Poipet. Desde allí hay tres opciones para continuar hasta Siem Reap. En autobús de línea que por lo que vimos ha subido de precio de 5€ a 9€ y sale cada 2 o 3 horas. En minivan que cuesta 10$ y sale cuando se llena y en taxi compartido que dependiendo de las habilidades de regateo puede ser unos 30$ (creemos que se puede coger el taxi directamente en la frontera pero no lo podemos asegurar). Está es claramente la mejor opción ya que entre cuatro sale rentable y se tarda hasta una hora menos en recorrer los 150 km que separan la frontera de Siem Reap o lo que es lo mismo la ciudad donde nos alojaremos para visitar los templos de Angkor desde donde continuará nuestra vuelta al mundo.
