¡Aterrizamos en Santa Cruz! La ciudad boliviana nos recibió con una tormenta de cine en la que el piloto tuvo que hacer un par de intentos antes de aterrizar. A diferencia que a Efrén, a mí me dio un poquillo de "canguelo" y no os quiero no contar a Sonia, la chica que iba sentada a mi lado, que regresaba a su país después de 4 años sin poder visitar a sus hijos. La historia de Sonia es la de muchos bolivianos que tienen la familia dividida entre su país de origen y su país de adopción.
Como llegamos de madrugada y no queríamos molestar a nuestros anfitriones de Coachsurfing, hicimos tiempo en el aeropuerto y aprovechamos para sacar dinero, comprar una tarjeta Entel para el móvil (algo que recomendamos hacer siempre si vamos a pasar un tiempo en un nuevo país) y tomarnos un buen café para despertar del largo viaje. Una vez que salió el sol, tomamos el autobús local (6 bs) y fuimos a conocer a Juanca y a Marcelo que nos acogieron en su casa como si fuéramos de la familia.
Como las condiciones meteorológicas no acompañaban y nosotros ya conocíamos la ciudad de Santa Cruz de nuestro último viaje, decidimos ver la ciudad desde una nueva perspectiva menos turística, a través de la mirada de nuestros anfitriones. Visitamos el mercado y pudimos cocinar con Marcelo que es chef y profesor de cocina. Aprendimos y discutimos sobre geografía, política, historia, deporte... También hubo tiempo para ir de “boliche”, como le dicen aquí a los bares o garitos y para tomar unos "Fernet", destilado de hierbas típico por esta parte del mundo.
¿Cómo es Santa Cruz? ¿Dónde está? ¿Qué se puede ver y hacer?
Santa Cruz es una de las ciudades más importantes de Bolivia, y la única que en la actualidad tiene vuelo directo desde Madrid. Se encuentra en el oriente del país, en la cuenca del Amazonas y, por tanto, su clima es tropical. Aprovechamos este artículo para aclarar que la capital de Bolivia es Sucre, una ciudad blanca y colonial, y no La Paz, como se nos ha enseñado siempre. La Paz es la sede de gobierno del país, lo que ha podido dar lugar a esta confusión, sin embargo Santa Cruz es el centro financiero, comercial e industrial de Bolivia, además probablemente un lugar de operaciones del narcotráfico.
El centro de la ciudad es agradable y conserva edificios coloniales. Es fácil moverse por Santa Cruz ya que la ciudad está construida abriéndose desde el centro hacia afuera y existen 9 anillos que la rodean. Así es típico orientarse diciendo cosas como "está en el segundo anillo". Lo más destacable del casco viejo son la Plaza 24 de septiembre y la Catedral basílica menor de San Lorenzo. La plaza recibe su nombre del levantamiento por el movimiento de independencia de Santa Cruz, allá por el 1810. En la actualidad esta plaza es lugar de reunión para los cruceños y es fácil ver niños correteando o adultos jugando al ajedrez.
Los edificios más emblemáticos de la ciudad se encuentran en esta plaza y son todos de estilo colonial: la Catedral, la Casa de Gobierno, el Centro Municipal de Cultura o el Club Social. La catedral metropolitana fue consagrada en 1915 aunque la construcción tiene ya más de tres siglos, en la época del Virrey Francisco Álvarez de Toledo.
Catedral Metropolitana (Fuente: Wikipedia)
Plaza 24 de septiembre (Fuente: Wikipedia)
Ahora bien, la belleza de Santa Cruz se encuentra en las afueras. Puerta del Amazonas, los alrededores de la ciudad tienen una belleza natural especial. Además de una geografía tropical llena de palmeras, árboles frutales, aves y otros animales, Santa Cruz es conocida por el Parque regional Lomas de Arena. Inaugurado en 1991, este parque situado a 12 Km al sur de la ciudad (se puede llegar en trasporte público hasta la entrada) es una especie de oasis de arena en medio de la selva que sirve de refugio para muchas especies. Hay varios senderos que llevan hasta las dunas y si el calor lo permite os recomendamos hacer la ruta a pie.
Desgraciadamente, cuando nosotros visitamos las dunas en 2016, el país pasaba por un momento de fuerte sequía y no pudimos disfrutar de las lagunas que convierten este ecosistema en un maravilloso oasis. La gente que visita el parque aprovecha estas lagunas para bañarse y disfrutar de una especie de playa en medio de Bolivia, país que no tiene salida al mar. Si, como nosotros, visitas las dunas y no hay lagunas, siempre puedes pegarte un baño en la piscina del resort "Sol y Arena" que se encuentra en el camino de vuelta.
En esta segunda visita a Santa Cruz pasamos dos días de descanso ya que nuestro destino era Cochabamba donde nos esperaban amigos que habíamos hecho en nuestra primera visita al país. Nos hubiésemos quedado con gusto unos días más en Santa Cruz con Juanca y Marcelo. Y es que una vez más la vida nos ha demostrado que la mayor parte de la gente que te encuentras por el camino es maravillosa y con ganas de compartir. Volveremos a Santa Cruz, a visitar a los amigos y a descubrir otros lugares de Bolivia que se siguen acumulando en nuestra lista como Samaipata o el Parque Nacional Amboró.